Siguen cayendo los secuestradores en el estado. En esta oportunidad, el kilómetro 7 de la autopista Caracas-La Guaira fue el escenario de un enfrentamiento entre un par de pillos y comisiones de los diferentes cuerpos de seguridad. En la balacera uno de ellos resultó herido y más tarde falleció, mientras que el otro se mantiene en fuga.
Este martes en horas de la noche, par de secuestradores que portaban chaquetas rojas con logotipos e inscripciones alusivas al Cicpc, abordaron a un bombero y lo maniataron, enviándolo a la parte trasera de su vehículo un Toyota Terios de color gris, con el cual pensaban dirigirse a la capital.
Una persecución en caliente se produjo minutos después, cuando una comisión de la Policía Municipal observó que el vehículo raptado era seguido por funcionarios de la Guardia Nacional. Evadiendo la voz de alto, los sujetos abrieron fuego contra los uniformados, que solicitaron además el apoyo del Eje de Homicidios Vargas.
En medio de la huida, los pillos colisionaron con varios vehículos que estaban en la autopista, en las adyacencias de la Arepera Socialista, provocando graves destrozos. Descendieron de la camioneta y entre disparos pretendían escaparse hacia la montaña.
En medio de la balacera, uno de los sujetos cayó herido, mientras que el otro se dio a la fuga. El antisocial que quedó en el pavimento fue trasladado al Periférico de Catia, donde falleció luego de su ingreso. Acto seguido el vehículo y el bombero fueron recuperados por las comisiones.
Guerra sin cuartel a secuestradores
Apenas el pasado 30 de junio se frustró otro secuestro de un vehículo, en el que el propietario también resultó ileso, mientras que los tres raptores murieron en el Hospitalito de Catia la Mar luego del enfrentamiento. Según datos de los cuerpos de seguridad, en junio se frustraron cinco secuestros, en los que fue común el uso de uniformes para perpetrar los hechos y el robo de vehículos con sus propietarios dentro. Queda claro que se le está dando duro al hampa con estas acciones. /MEM/ar