Luis López
En un riesgo se ha convertido para el sector transporte pesado llevar alimentos a todo el país debido al mal estado de las carreteras y a la inseguridad reinante.
La aseveración la hace Emidio Palumbo, presidente de la Cámara de Transporte Pesado, quien indica: “No hay trabajo para todos y los pocos choferes que están trabajando asumen este compromiso sabiendo que sus vidas están en peligro. La gente tiene hambre y cualquier transporte que se accidente pierde su carga porque la saquean”.
Destaca la necesidad de establecer mesas de trabajo con respecto al combustible porque “no están abasteciendo la cantidad que un transportista requiere para llegar a su destino”.
Palumbo reitera que existe la mayor disposición de apoyar y que los choferes también son héroes anónimos, porque si no llevan la comida a los estados, la situación sería aún más crítica.
Agrega que la falta de oportunidades de carga mantiene a estos trabajadores en condiciones precarias y sin ingresos para mantener a sus familias.