Preescolar Betty de Herrera ya lleva dos años sin baño

Representantes han intentado reparar la tubería tapada por sus propios medios

Unas tuberías tapadas han dejado sin baño a niños y maestras del preescolar Betty de Herrera, por lo que desde hace más de dos años han tenido que utilizar el patio trasero.

La situación incomoda a padres y representantes quienes han intentando solucionar el problema pero se les ha hecho imposible, por lo que piden la atención inmediata de la Gobernación del estado.

“Esto afecta a los niños que están en la etapa más importante de su formación, cuando se les puede enseñar a controlar sus esfínteres. Es en el preescolar donde comienzan a socializar con los otros, a conocer sus cuerpos, pero cómo puede ocurrir esto si están yendo al baño en un patio”, dijo Amarilis Villar, una representante.

Explicó que su hijo, al igual que algunos de sus compañeros, evacuó en sus pantalones por no querer decirle a la maestra que debían ir al baño. “A los niños eso no les gusta. Mi hijo quería hacer su necesidad y le daba vergüenza ir al patio, quiso aguantar pero no pudo y se hizo en los pantalones”.

Aseguró que enseguida la maestra la llamó para que buscara al niño. “Es lamentable que nuestros hijos estén pasando por eso”. Agregó que los infantes están viendo clases hasta las 10:30 am, lo que también influye en su rendimiento escolar.

“Antes veían clases de 7:00 am a 10:00 am, pero las maestras pidieron media hora más para lograr avances educativos. Esto los está afectando en todos los sentidos”.

Por otro lado, señaló que los padres han entrado a la escuela y han comenzado a cavar para buscar el problema de las tuberías tapadas, sin embargo no han tenido éxito.

“Mi papá vino y realizó una inspección. Al parecer son las raíces de los árboles de mango que están obstruyendo las tuberías, pero él dice que este es un trabajo grande donde se tienen que romper hasta las calles y nosotros por más unidos que estemos no podemos cubrir todos esos gastos”.

Hizo un llamado a la Gobernación para que atienda las denuncias de las maestras ante este problema, pues son los niños quienes pagan las consecuencias. “Ellas nos dicen que han mandado cartas, que han ido a todos lados, pero que vienen, ven los baños y no hacen nada”.DC/jd

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