Aún sigue vigente el espíritu libertario del 23 de enero de 1958
-Hoy más que nunca el pueblo busca restituir la democracia
Laura De Stefano
A 59 años del levantamiento cívico militar contra el régimen dictatorial del general Marcos Pérez Jiménez, ocurrido el 23 de enero de 1958, aún sigue vigente en los corazones de los venezolanos ese hecho histórico porque significó el inicio de la libertad y de la democracia.
El secretario general de la Sociedad de Escritores del estado Varga y activista del partido Avanza Progresista, Lauren Caballero, manifestó que el pueblo sigue profundamente enamorado de esa condición democrática que nos caracteriza desde hace mucho tiempo. Es por ello que hizo un llamado al rescate de la unidad nacional y a la reconciliación.
Lamentó que en los últimos 17 años no se vean esas grandes manifestaciones para celebrar el día en que todos los sectores de la sociedad estuvieron representados en el Pacto de Punto Fijo, el cual se firmó el 31 de octubre de 1958. “El Partido Comunista fue el único que se excluyó y prefirió la clandestinidad, desde donde se levantó en armas contra el Estado.”
Caballero resaltó el comportamiento democrático que tuvo el vicealmirante Wolfang Larrazábal, quien a pesar de ser el presidente de la Junta de Gobierno, respetó la voluntad del pueblo cuando pidió la sustitución de dos militares por los empresarios Eugenio Mendoza y Blas Lamberti. “Tuvo la oportunidad de hacerse del poder, pero no lo hizo.”
Luchar por el cambio
Señaló que no nos podemos olvidar cuáles fueron las causas que llevaron al 23 de enero. Una de ella fue la profunda represión de la dictadura de Pérez Jiménez que provocó la muerte de muchos venezolanos, entre ellos Antonio Pinto Salinas, secretario de Acción Democrática. En la actualidad tenemos un régimen que arremete contra aquellos que piensan diferentes.
Otros de las razones fue la falta de empleo, la aguda crisis económica que se vivía para ese momento, la falta de libertad individual, la censura a la prensa, no había la posibilidad de que la disidencia se expresara. “Un símbolo de esta tiranía fue la cárcel de Guasina en el Orinoco, donde los presos morían en el abandono. Allí falleció de cáncer en 1953 el secretario de AD, Alberto Carnevali.”
“El espíritu del 23 de enero sigue vivo, aún corre por las venas de todos los venezolanos. Solo que ahora estamos atravesando por una terrible crisis institucional, carente de principios, y de valores morales y éticos. Pero, lo peor que puede suceder es no hacer nada para cambiar. Nos tiene que doler esta tierra y si tenemos que morir por ella, lo haremos por una causa que vale la pena.”
Dijo que este Gobierno es excluyente y no se diferencia mucho del gobierno del general Marcos Pérez Jiménez, con la única que éste último fue eficiente en algunos aspectos como las grandes obras de ingenierías. En cambio el chavismo no ha construido ni una universidad, solo ha ocupado edificios para cambiarles de nombre.
Gran movimiento de unidad
El secretario general de la MUD en Vargas, Carlos Texeira, señaló que el 23 de enero de 1958 fue la culminación de un gran movimiento de unidad iniciado por el Partido Comunista junto a los partidos de Acción Democrática, Copei y URD en unión con los trabajadores, empresarios, sindicalistas, periodistas y el sector militar.
“La Junta Patriótica logró tomar las riendas del país y la nación no dio un salto al vacío, por el contrario se mejoró la calidad de vida de los venezolanos con la creación de universidades autónomas, se masificó la educación en más de 60%, la población salió del analfabetismo y de la escasez. Además nació la clase media profesional y técnica que brindó los estándares sociales hasta 1960 cuando Venezuela entró nuevamente en una crisis.”
Texeira manifestó que existe un paralelismo entre el gobierno de Maduro y la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, con la diferencia que éste último se rodeó de intelectuales civiles que integraron su gabinete. Otra similitud es la política represiva que tuvieron ambos. Por ejemplo uno se valió de la Seguridad Nacional para perseguir a los disidentes, pero peor que la SN lo es el Sebin que ejerce la violencia contra los opositores al régimen.
“Ataca a las universidades, mantienen un cerco económico y se caracteriza por tener un rasgo totalitario de corte militar que no permite el pensamiento histórico. Pero, hay otro rasgo y es que el pueblo luchará como lo hizo en 1958 para restituir la democracia con una nueva unidad.”