La vía de Las Tunitas es una guillotina
Luisana Brito, [email protected] El estado deplorable en el que se encuentra la vía de Las Tunitas, en Catia la Mar, genera daños en las unidades del transporte público. Choferes se sienten entre la espada y la pared al no contar con cauchos ni repuestos para atender sus equipos de trabajo.
Denunciaron que el punto más crítico es en la entrada del sector Rincón Chiquito, frente a la panadería San Remo y a la ferretería Aquí Ta, donde se han presentado múltiples accidentes automovilísticos al tratar de esquivar los huecos.
También se quejaron que el Instituto de Infraestructura no ha desplegado Fiesta del Asfalto, como en la avenida Soublette; la condición de la vía representa un riesgo tanto para el operador como para los usuarios.
Luis Alfonzo, socio de la Unión de Conductores del Municipio Vargas, línea que cubre Las Tunitas-Vista al Mar-Arrecife y Terminal de Catia la Mar, dijo que de tener una flota de 200 autobuses solo trabajan 30.
“Trabajamos a media máquina. Las vías están muy deterioradas y los huecos ya no se pueden ni contar de tantos que hay. En la entrada de Rincón Chiquito trataron de repararla y solo dejaron desniveles”.
Dotación de cauchos brillan por su ausencia
Robert Aponte, también chofer de la línea, manifestó que muy pocos buses han sido tomados en cuenta para ser beneficiados por la Proveeduría Socialista del Transporte para la distribución de cauchos.
“La semana pasada compré un caucho nuevo en ciento cincuenta mil bolívares y como el tren delantero esta dañado me lo desgastó; ese es un dinero mal invertido. Se me partió la maestra y gasté treinta y cinco mil bolívares. Todo es dinero y no vienen a asfaltar las vías; vamos a tener que pararnos para que nos presten atención”, alertó el conductor.
Esta situación también afecta a José Graterol, quien lleva más de tres años en espera de los neumáticos. “Me siento engañado. Hablo con el director de la línea y me manda hablar con el presidente de la Proveeduría, y cuando me acerco hasta allá me dicen que eso con la asociación”.
Los usuarios no aguantan el mal servicio
Aníbal Cedeño: El servicio es pésimo, sobre todo en horas pico. Pareciera que no quisieran trabajar y esconden los carros, quien pasa trabajo es el ciudadano de a pie.
María Gordiño: Hay muchas personas y pocos carros trabajan, pero se encuentran en mal estado. Para abordar un carro esperamos mucho tiempo. LB/yg