Crítica escasez de insumos para pacientes en Terapia Intensiva

Doriana León.- Ana Luisa Oropeza, paciente hipertensa y con hipotiroidismo, se complicó por el incumplimiento de tratamiento, y desde el pasado miércoles se mantiene hospitalizada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital José María Vargas de La Guaira.

A siete días de haber sido recluida, sus familiares aseguran que la falta de insumos en el servicio los ha obligado a “pedir prestado y rasguñar de aquí y allá”, para poder costear los caros estudios que le han indicado.

“Hemos tenido que pagar varios perfiles tiroideos y gasometrías arteriales, para que los médicos realicen el diagnóstico certero. Mi mamá sufre además de obesidad mórbida, que complica aún más sus patologías. Ella debe cumplir dietas, que con la situación del país es prácticamente imposible”, comenta Yuraima Oropeza, hija de la paciente hospitalizada.

Esta humilde familia, procedente de Carayaca, requiere de ayuda gubernamental para intervenir quirúrgicamente a Ana Luisa. “Los médicos dicen que necesita un bypass gástrico para disminuir los riesgos, sin embargo, no tenemos cómo pagar esa operación, que no la hacen en centros públicos de salud”.

Vargas sin ambulancia de Cuidados Intensivos

Las pocas ambulancias que ruedan en el estado, están en condiciones que no son adecuadas para el traslado de pacientes. Muchas carecen de aire acondicionado, bombonas de oxígeno, camillas y hasta insumos básicos como suturas, yodopovidona o gasas.

Cuando un paciente que se encuentra en Terapia Intensiva necesita algún estudio especial, como tomografías o resonancias magnéticas, el tema del traslado se convierte en un dolor de cabeza para los familiares y seres queridos del enfermo. “Estamos esperando desde el sábado para hacerle una tomografía computarizada de tórax a mi mamá. Debemos trasladarla a la Clínica Siempre en Macuto, que es donde la hacen; sin embargo, los médicos nos han alertado de los riesgos que conllevan sacarla del hospital en un vehículo que no esté adecuado para un paciente en estado crítico”, dijo Oropeza.

Expertos en traslados, aseguran que una ambulancia de cuidados intensivos debe contar con tomas de oxígeno y respirador artificial. “En Vargas no hay ninguna con esas características. Sólo las empresas de traslados médicos privados pueden contar con un vehículo acondicionado de esta manera, y la tarifa mínima podría ser de Bs. 30 mil”, señalan.

Sólo 6 cupos para más de 300 mil habitantes

Desde agosto del 2015, Vargas redujo su capacidad de camas de cuidados intensivos, de 12 a seis, tras el cierre técnico de la UCI del hospital Rafael Medina Jiménez de Pariata por la avería de todos los ventiladores mecánicos disponibles en el servicio. “Esto pone al estado en un punto crítico, pues sólo se cuentan con las camas de la unidad del Seguro, que generalmente está colapsado, al ser el hospital más grande de la región”.

Los especialistas en medicina crítica del estado aseguran que hay un déficit del 85% en cuanto al servicio. “De acuerdo a la población, Vargas debería contar con al menos 48 ó 50 camas de Terapia Intensiva”.

Resaltan que en muchas ocasiones, las terapias intensivas de la región se saturan de pacientes, “debido a que la mayoría que se complican en centros privados, acuden al Seguro o a Pariata, pues la póliza de seguro se consume rápidamente. Actualmente, el día de un paciente en una UCI puede costar alrededor de 100 mil bolívares”.

Insumos básicos ¡No hay!

Fuentes de la UCI de La Guaira, informan que faltan o cuentan con pocas unidades de Dopamina, Adrenalina, Nitroglicerina o Noradrenalina. “Son insumos que se requieren de manera elemental para tratar distintas afecciones que pueda presentar el paciente al ingresar a la unidad”.

Señalan que hay poco material para las máquinas de esterilización a gas, utilizadas para la desinfección de instrumentos de cirugía y accesorios de los ventiladores o respiradores artificiales.

La patología de mayor ingreso es el traumatismo craneoencefálico. “Los fines de semana aumenta la demanda de pacientes, pues los motorizados que conducen de manera irresponsable a altas velocidades sufren aparatosos accidentes que generan severas complicaciones en la persona”.

Otras áreas de atención son los cuadros gineco-obstétricos, síndrome coronario agudo, descompensaciones en diabetes y pacientes neuroquirúrgicos.

Médicos “son unos valientes”

Pacientes y familiares, agradecen a los galenos, que a pesar de toda la crisis, siguen dando la cara en los hospitales. “Mi hermana tiene más de 20 días hospitalizada en la terapia del hospital Vargas y de verdad que la atención en el servicio ha sido maravillosa. A pesar de todos los problemas que puedan tener, siguen siendo cordiales en el trato a los pacientes y con nosotros, que estamos ávidos de una respuesta esperanzadora ante la gravedad de nuestro ser querido”, señaló Yasmín González./ar