A la quebrada Juana de Arco no le cabe una bolsa más de basura
Luisana Brito, [email protected] Habitantes del sector Juana de Arco en Pariata, Carlos Soublette, piden a la Alcaldía limpiar y desmalezar la quebrada, ya que está desbordada de basura, escombros y animales en estado de descomposición, pues presuntamente algunos vecinos se han dado a la tarea de arrojarlos dentro de la misma.
Aseguran que por las contantes fallas en el servicio de la recolección y con las lluvias registradas en los dos últimos meses, toda la suciedad quedó atrapada bajo el puente que comunica a los sectores, generando malos olores y contaminación ambiental, además de la proliferación de alimañas por las casas aledañas.
Nahití Sarría, explica que desde hace más de un año no le hacen mantenimiento al cauce, a pesar de que han solicitado la ayuda de la Corporación de Servicios Múltiples para esta asistencia, ya que las aguas se quedan empozadas y hay gran cantidad de zancudos, provocando que la zona esté afectada por un brote de dengue y escabiosis.
Revela que esta situación los mantiene estresados, pues temen que las aguas se desborden, como ha ocurrido en varias oportunidades.
“Cuando llueve, la zozobra es permanente, hay demasiada maleza y la basura se queda debajo del puente. El aseo no pasa con frecuencia, pero cuando lo hace, solo se llevan unas cuantas bolsas y dejan un reguero. En el cuarto de basura, la pared que da hacia la quebrada, se le abrió un hueco, por allí se cuelan los desechos hacia el río. Tuvimos que colocarle un colchón viejo, que no soluciona nada, porque ahora se sale hacia la calle, impidiendo el paso de los vehículos. No sabemos qué hacer con tanta contaminación que nos rodea”.
Por su parte, Rafael Subero, manifiesta que por la zona se están propagando los roedores, incluso se meten dentro de las casas. “Hemos agotado todas las instancias y continuamos sumergidos en la misma desidia. Hago un llamado a las autoridades para que nos tomen en cuenta, ya que están muchos niños expuestos a que sean picados por uno de estos”.
El agua llega mensualmente
Del mismo modo, Subero revela que el servicio del agua potable llega mensualmente y dura menos de 12 horas, obligándolos a pagar una cisterna privada, ya que no son beneficiados con los operativos que brinda la Gobernación, Alcaldía e Hidrocapital.
“Cuando llega el agua no nos da tiempo ni de llenar los pipotes. Tenemos un montón de ropa sucia y necesitamos cumplir con los quehaceres del hogar. Hacemos un llamado al gerente de Hidrocapital para que restituya el servicio, por lo menos cada dos semanas”.LB/jd