Cabrera pierde motivación en Detroit

A estas alturas de la temporada el año pasado, Miguel Cabrera seguía en acción pese a lesiones, con el fin de ayudar a los Tigres de Detroit a clasificar para la postemporada.

En septiembre de 2013, se vio en una situación similar. Pero ahora mismo, el venezolano no tiene motivación de luchar por un boleto a la postemporada, algo que lo afecta más que cualquier dolencia física.

Cabrera, quien lidera la Liga Americana con un promedio de .335, está en posición de conquistar su cuarto título de bateo en cinco años. Pero eso no le sirve de consuelo, ya que en el mes de septiembre, lleva promedio de .189.

El inicialista no se ha visto fuera de la contienda por los playoffs a estas alturas de una campaña desde 2010. No ha experimentado una temporada perdedora en Detroit desde el 2008, su primer año con los felinos.

A la vez, ha visto a dos ex compañeros de equipo, David Price y Yoenis Céspedes, brillar con nuevas novenas, Azulejos y Mets, respectivamente, que van camino a la postemporada tras salir de los Tigres en julio.

«Son muchachos que hubiéramos querido ver aquí si estuviéramos en la contienda. Uno se pone a pensar en lo divertido que sería con ellos. Si el equipo estuviera junto, lo bueno que seríamos. Es una diferencia enorme», dijo Cabrera.

El criollo aún se encontraba en la lista de lesionados por un tirón en la pantorrilla izquierda a finales de julio cuando Price y Céspedes fueron canjeados justo antes de la fecha límite para realizar transacciones.

Justin Verlander se había reintegrado al equipo para ese entonces, pero apenas comenzaba a recuperar su forma. El venezolano Víctor Martínez también estaba de regreso, aunque pasando por un bache ofensivo.

Tomando en cuenta los problemas con el pitcheo, la gerencia no llegó a convencerse de agregar jugadores en lugar de cambiarlos, lo que marcó una especie de desarme de un equipo ganador en las últimos campañas.

«Si hubiésemos tenido salud, creo que estaríamos en la pelea ahora mismo», dijo Cabrera. «No sé si estaríamos en los playoffs o en el primer lugar, pero creo que hubiéramos estado en condiciones de luchar».

Las próximas decisiones del club incluirán la situación del manager Brad Ausmus, cuya permanencia será evaluada cuando termine la temporada, según el gerente general Al Ávila.

Al preguntársele si le ha afectado la situación de Ausmus, el aragüeño respondió que «mucho, porque no es su culpa. ¿Por qué culpar a alguien de esa manera? ¿Por qué dice la gente que hay que despedirlo?»

«Tuvimos muchas lesiones año. No nos acoplamos esta temporada. Creo que ése es uno de los motivos. Muchos jugadores importantes estuvieron fuera uno o dos meses. No se puede ganar así, porque necesitamos a todos».