Transportistas no denuncian para no perder el día de trabajo
Lorena Correa, [email protected] Luego del despliegue del dispositivo de seguridad contra los “robabusetas”, los transportistas denuncian que no le están “viendo el queso a la tostada”, puesto que aún siguen registrando alrededor de seis robos diarios en la ruta Catia la Mar-Tanaguarena.
Los conductores, quienes prefieren reservar su identidad, aseguran que ya tienen identificados a los atracadores, por eso en muchas ocasiones solo roban a los pasajeros, lo que se convierte en un arma de doble filo, porque los usuarios los tildan como cómplices. “En muchas oportunidades no nos roban porque ya lo han hecho antes, pero los clientes no entienden y solo se dan a la tarea de señalarnos”.
Resaltan que han tomado la decisión de no denunciar los atracos porque están “cansados” de hacerlo y tener parada la unidad por mínimo cinco días, mientras se realizan las investigaciones, y “al final no resuelven nada”.
“Estamos contra la pared en todos los sentidos. Los delincuentes nos exigen no denunciar, porque en caso de hacerlo tomarán acciones en nuestra contra, por otro lado si denunciamos nos detienen la unidad varios días, dejándonos sin laborar, por eso no formularemos más denuncias”.
Destacan que ya saben quiénes son y dónde aprovechan para subir a robar, sin embargo, están molestos por no recibir respuesta por parte de los efectivos de seguridad. “Los malhechores se burlan de nosotros como quieren. Tal vez la policía espera que asesinen a uno de los choferes para agilizar los controles pertinentes, porque los actuales no están dando buenos resultados”.
Explican que la Soublette, Los Cascabeles, Barrio Aeropuerto, Santa Eduvigis, La Torre y El Trébol, son los lugares donde se aprovechan para despojar a los pasajeros de sus pertenencias. Se suman La Guaira, Macuto, Caribe y Tanaguarena, como las parroquias con mayor número de robos, especialmente en horas de la noche.
Reducen horario por temor
Comentan que se han visto en la obligación de reducir sus jornadas laborales por temor. Por eso, tienen dos meses trabajando hasta las seis de la tarde, mientras que anteriormente laboraban hasta las 9:00 pm.
Señalan que están “a la buena de Dios” cada vez que salen a buscar el pan de su hogar. “Ahora la situación es más grave porque también están robando los bolsas de alimentos de los pasajeros, de esto no se salva nadie, estamos en las manos de Dios. Salimos de casa sin saber si regresaremos con vida, por eso los puntos de control de solo una semana no ayudan en nada”.
“Cargadores de carros” siguen haciendo de las suyas
Afirman que están cansados de solicitar en reiteradas oportunidades la prohibición de los “cargadores de carros”, pero el secretario de Seguridad Andrés Goncalves no ha tomado cartas en el asunto.
“La falta de seguridad le está dando cancha a estás personas, que se dan vida fomentando la delincuencia en las busetas”. LC/ar