Protestan frente al TSJ exigiendo respuesta al recurso sobre el salario de hace 5 meses
El Frente Popular en Defensa del Salario (Frenpodes) junto a organizaciones aliadas, se congregaron este jueves 14 de diciembre frente a la sede del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) en Caracas, para exigir una respuesta respecto al recurso de amparo que introdujeron desde hace cinco meses.
En dicho recurso legal solicitan mejoras salariales y el rescate de las prestaciones sociales de los trabajadores.
Thais Rodríguez, miembro del Frenpodes, expresó que este recurso propone un aumento del salario mínimo de acuerdo con la canasta básica, como la establece el artículo 91 de la Constitución venezolana.
“No tiene sentido un aumento salarial simbólico de 4, 5 o 10 bolívares como están diciendo ahorita, que es probable que aumenten el 10 %, lo cual representa solamente 13 bolívares”, reclamó.
Esta aseveración sale de las declaraciones de este martes 12 de diciembre del diputado de la Asamblea Nacional, Óscar Ronderos, quién reveló que el Presupuesto Nacional para el año 2024 incluiría un aumento salarial del 10 % y de bonificaciones del 70 %.
Salarización de los bonos
No obstante, Frenpodes pidió la salarización del Bono de Guerra Económica y de la cesta ticket, de modo tal que estos montos incidan en el cálculo de las prestaciones sociales, vacaciones y aguinaldos.
Rodríguez enfatizó que la legislación que rige los recursos de amparo, fija un plazo de cuatro días para que el juez convoque a las partes a exponer sus planteamientos y 24 horas para que el TSJ dicte sentencia.
En el 2017, solo el 18 % del presupuesto nacional se destinó a los salarios, mientras que más del 50 % lo acapararon los sectores privilegiados, lo cual refleja una marcada desigualdad y evidencia que el trabajador no es prioridad, según Rodríguez.
“La gente tiene que tener cuatro o cinco trabajos o si no, migrar para poder sostener su existencia y la de las familias que quedan aquí”, expresó Rodríguez.
Señaló además que dicha situación se debe no solo a las sanciones impuestas por Estados Unidos, sino también al manejo inadecuado de los recursos y a la profunda corrupción en empresas como Pdvsa.
“Cómo funciona un país, las instituciones, escuelas, universidades y hospitales si no alcanza el salario, si los trabajadores no tienen cómo vivir, si con lo que les pagan, ni siquiera tienen cómo trasladarse a sus puestos de trabajo”, cuestionó.