Una ofensa a Dios
El papa Francisco instó este do a Rusia a que renueve el acuerdo para la exportación del grano por el Mar Negro porque consideró “una gran ofensa a Dios” hacer la guerra sobre estas materias primas.
“Hago un llamamiento a mis hermanos, a las autoridades de la Federación Rusa, para que se restablezca la iniciativa del Mar Negro y el grano pueda ser transportado con seguridad”, dijo el pontífice al final del rezo del ángelus en la plaza de San Pedro.
Pidió de nuevo oraciones para la martirizada Ucrania “donde la guerra lo destruye todo, incluso el grano” y consideró que “esto es una gran ofensa a Dios porque el grano es su don para alimentar a la humanidad y el grito de millones de hermanos y hermanas que pasan hambre sube al cielo”.
El pasado 17 de julio, Moscú suspendió el acuerdo de exportación de grano a través del mar Negro desde puertos ucranianos, suscrito inicialmente en julio de 2022 con la mediación de Turquía y la ONU.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, afirmó que Ucrania “es y será garante de la seguridad alimentaria mundial”, después de que el papa Francisco pidiera a Rusia la renovación del acuerdo de exportación de grano.
“La reacción de los líderes religiosos mundiales ante el terror de los misiles rusos y la destrucción de los productos agrícolas ucranianos es extremadamente importante”, afirmó en un mensaje difundido en redes sociales, a la hora de proteger al mundo de una crisis alimentaria.