Ramos: La Locat busca acabar con la autonomía municipal
El proyecto de Ley Orgánica de Armonización de las Potestades Tributarias de los Estados y Municipios (Locat) ya se aprobó en primera discusión el 25 de agosto con un breve debate, en la Asamblea Nacional (AN).
La presidenta de la Cámara de Comercio de La Guaira, Cipriana Ramos, conversó con el diario La Verdad de Vargas sobre el artículo 156 numeral 13, Constitución Nacional que autoriza a la AN a legislar para garantizar la armonización de las potestades tributarias.
“A quien menos beneficia esa ley es a los gobernadores y alcaldes, ya que le están quitando competencia. El poder se está centralizando y con ello se comienza a perder la autonomía municipal”.
Para Ramos hay aspectos de la ley que son innecesarios por estar establecidos en la Constitución.
En ese sentido, el proyecto de ley promueve en el artículo 8 que los “estados y municipios no podrán cobrar impuestos, tasas o contribuciones que no se encuentren previstos en leyes estadales u ordenanzas, respetando los límites establecidos en la Constitución”.
El texto surge luego de dos años de quejas del sector empresarial del país, asfixiado por el aumento recurrente de los tributos.
“El poder central busca decirnos como deben ser nuestras finanzas, cuando realmente quien conoce mi territorio soy yo. En ese sentido, quien debe garantizar y promover el desarrollo económico es el alcalde del municipio, no un poder central”.
De igual forma, se supo que el Estado venezolano somete a una tributación excesiva tanto a las empresas como a los ciudadanos.
Este proceso ha sido catalogado por el gremio empresarial como “voracidad fiscal”, un problema que afecta a las empresas, y también a los consumidores, a quienes finalmente se trasladan esos
costos, inevitablemente.
“Esta voracidad surge porque los alcaldes no están recibiendo los recursos necesarios, a través del Situado Municipal, establecidos en la Constitución, y entonces quieren meterle la mano en los bolsillos a todos los comerciantes y a los consumidores, al final”.
Otra de las problemáticas que destaca Ramos es lo referente a las regalías, pues esto demanda un mayor gasto para los comerciantes, al tener que ser ellos quienes suplan las dádivas que pretenden entregarse desde el gobierno regional y municipal.
“Cuando se tiene un alcalde que regala lavadoras, neveras, medicamentos, y demás, comienzan a suceder cosas como las que se viven en la Guaira. Lo ideal es que todos tengamos ingresos suficientes para poder cubrir nuestras necesidades y que ese aporte social de la alcaldía salga de su propio presupuesto”.
“Lo mejor sería que la Asociación de Alcaldes y Gobernadores revisen y estudien a profundidad que hacen cada uno tanto en sus labores como con los recursos que le son asignados. Con esta ley dudo que salgamos beneficiados, y lo más probable es que las gobernaciones y las alcaldías busquen como seguir haciéndolo, quizás creando empresas privadas, cosa que tampoco es una solución, ya que lo público no debería tener injerencia en lo privado y viceversa».