Parálisis del sueño: ¿Una actividad paranormal?

  • La personas experimentan esta afección al menos una vez en su vida

Muchas personas han tenido un sentimiento de angustia debido a la incapacidad de moverse y de hablar luego de quedarse dormido o al despertar, cuando se mantiene un estado de conciencia. Esta afección suele conocerse como Parálisis del Sueño.

La psicóloga María Laura Yriarte, explicó que, mientras suceden estos episodios, la musculatura “no responde a las órdenes del encéfalo que ya se encuentra activo”. Por lo tanto, las personas suelen tener alucinaciones no patológicas que aumentan el sentimiento de terror y angustia.

“No se ha descrito alguna causa específica para esta afección, pero se ha podido vincular con personas que padecen de narcolepsia, un trastorno del sueño que provoca somnolencia excesiva durante el día”, dijo.

La parálisis del sueño también se ha podido relacionar con los cambios o faltas de hábitos del sueño, así como también podría formar parte de un factor hereditario o ser provocada por el consumo de sustancias.

Sin embargo, en ocasiones suelen presentarse episodios aislados. En palabras de la psicóloga, es común experimentar parálisis del sueño al menos una vez en la vida. Según los diferentes estudios realizados, entre el 50 y 60% de la población mundial ha experimentado estos episodios.

¿Qué provoca la parálisis del sueño?

El sentimiento de terror es la experiencia más comentada por quienes han vivido esta situación. “Puede ir acompañado de alucinaciones visuales, auditivas o táctiles, las cuales no son patológicas, sino hipnagógicas (al quedarse dormido) o hipnopómpicas (al despertarse)”, explicó Yriarte.

En la mayoría de los casos, estas alucinaciones provocan que el individuo escuche o vea a un intruso que entra en la habitación, con la intención de hacer daño. “Se puede sentir presión en el pecho, sensación de estar siendo asfixiado, levitando, cayendo e incluso estar siendo abusado sexualmente por una figura”, señaló.

Características

Cuando se habla de alucinaciones táctiles, se refiere a cuando la persona experimenta la sensación de que el colchón se hunde, que alguien se sienta en la cama, que le retiran las sábanas o que tocan su cuerpo.

En cuanto a las alucinaciones visuales, el individuo generalmente puede ver a una presencia camuflada entre las sombras de la habitación, aunque en algunos casos estas presencias son descritas detalladamente.

Finalmente, en las alucinaciones auditivas, se tiene la convicción de que los sonidos son reales y que provienen del exterior más que de su mente. Son sonidos diversos, muchas veces zumbidos, silbidos o chillidos.

En otros casos son sonidos identificables concretos como timbres de teléfono o puerta, sirenas, iento, herramientas, arrastrar de muebles, vidrios o vajilla que se rompe o música extraña.

También suelen escucharse voces humanas en forma de griterío o susurros leves sin un mensaje claro.

¿Cuáles son los riesgos?

Debido a la gran cantidad de alucinaciones, el miedo suele hacerse presente en las personas que experimentan la parálisis del sueño. Algunos sienten miedo a morir en el episodio, pero “generalmente es un evento inofensivo, puesto que no existe riesgo para la salud”.

Para la psicóloga es fundamental que haya una psicoeducación con respecto a la parálisis de sueño, puesto que, a su parecer, combatiría la ansiedad que se manifiesta antes, durante y después de cada episodio.

No es una actividad paranormal

Los altos niveles de ansiedad suelen dispararse debido a la creencia que se ha desarrollado a lo largo de la historia, en la que se relaciona la parálisis del sueño con momentos paranormales o actividad demoníaca.

“Hoy en día muchas personas todavía relacionan estos episodios con actividades sobrenaturales y esto fomenta a que se dispare aun más la ansiedad”, aseguró la psicóloga.

En algunas culturas, la parálisis del sueño es atribuida a sucesos paranormales, donde algunos demonios, llamados súcubos e íncubos, toman la forma de una mujer físicamente atractiva para introducirse en los sueños de los hombres y seducirlos.

También se suele vincular con espíritus o fantasmas que inmovilizan a las personas para hacerles algún tipo de daño. Sin embargo, estas teorías han sido vista como netamente mitológicas y místicas, sin ningún fundamento científico.

¿Cómo prevenirla?

Yriarte indicó que, mejorar los hábitos de sueño (tener un horario fijo para dormir y evitar siestas largas) y disminuir los niveles de estrés son importantes para evitar o prevenir los casos de parálisis del sueño.

Realizar ejercicio físico, evitar la utilización de computadoras o celulares antes de dormir y evitar ingerir sustancias como la cafeína o el alcohol también son puntos importantes que deben cumplirse para no ser una víctima de la parálisis de sueño.

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