Nueva etapa del combate a la corrupción debe iniciar con un aumento de salarios
Desde el Estadio Jorge Luis García Carneiro el presidente Nicolás Maduro, anunció de nuevo acciones de lucha “contra la corrupción y el burocratismo de funcionarios que están al frente de cargos y no le cumplen al pueblo”.
Aunque no es la primera vez que el Mandatario lanza sus advertencias a los que caen en corrupción, la ratificación de que pondrá “mano de hierro contra la indolencia y la irresponsabilidad de los corruptos”, nos anima a escribir estas líneas, a los efectos de que todos estemos claros.
Lo primero es que “la necesidad tiene cara de perro” y que la crisis económica prolongada, seguramente hace mella en todos los niveles de gobierno: “A cualquiera le parpadea la honestidad cuando si es guardia nacional raso gana solo 6 dólares mensuales, y si es general, pues 10 dólares. Les dan bonos mensuales, es cierto, pero no pa- san de $20”, me dice un amigo.
Por ejemplo: Los policías rasos de la municipal, estadal o del Cicpc ganan 20 dólares mensuales, y un Comisario General solo $45. Ellos que arriesgan la vida por la seguridad de la gente y de sus bienes, no tienen remuneración acorde.
Pagar buenos salarios es un paso esencial en la lucha anti corrupción que promete el presidente Nicolás Maduro, quien debería primero aplicar mano de seda y ordenar un aumento general para sus colaboradores, los empleados públicos, quienes son los peor pagados en este país que tiene las reservas pe- troleras más grandes del mundo, y el privilegio de tener un Presidente Obrero, un sindicalista, un hombre que viene de abajo y sabe de las necesidades de los trabajadores. Y que nadie me venga decir que “no hay peor cuña que la del mismo palo”.
Hay que mejorar los sueldos de los funcionarios públicos, de las enfermeras, los médicos y los educadores, para que podamos exigirles honestidad y mejor disposición para el trabajo que realizan en pro de la gente del pueblo, trabajo por el cual se les paga, pero se les paga mal.
Yo, en lo personal, como parte de mi trabajo social, muchas veces tuve que reclamar a médicos y enfermeras cuando le prestaban un servicio displicente a quienes acudían a un hospital.
-La señora viene aquí porque no tiene con qué pagar una clínica, pero usted no está aquí de gratis, a usted le paga un sueldo el gobierno con el dinero que es de esa señora y de todos los venezolanos, le restregué una y otra vez a las profesionales que no atendían bien en los hospitales.
Y eso que antes ganaban buenos sueldos. ¿Cómo será ahora, que el sueldo no alcanza ni para comer y andan con los zapatos rotos y el uniforme también?
Sí, esta es mi convicción y tengo derecho a decirlo, esta nueva Cruzada anti corrupción de Maduro debería comenzar con un aumento general de salarios, aprovechando la nueva bonanza petrolera: 92 dólares el barril, hoy domingo 20 de febrero de 2022, a las 8 de la noche en Venezuela. Si el gobierno aumenta los salarios de la administración pública a algo razonable, que no afecte tanto las finanzas públicas, digamos un salario mínimo de 1.5 petros, es decir 140 dólares, algo igualmente bajo, pero por lo tanto posible de realizar, eso aumentaría la capacidad de consumo de alimentos y movería un poco nuestra golpeada economía.
Tenemos una nueva Bonanza Petrolera, aunado a una recuperación de la producción, además ya el gobierno dejó de darle petróleo fiado a las islas del Caribe, lo cual es un gran ahorro.
Aumento de sueldos para frenar la “operación rebusque” que es el nuevo deporte nacional. Aumento de sueldo para aliviar un poco el hambre generalizada y que haya menos injusticia social, un poco menos de sufrimiento para el pueblo.
El sueldo mínimo más alto en América Latina lo tienen Chile, Ecuador y Panamá: 415 dólares americanos en promedio. Luego México, Colombia, Perú, Argentina y Brasil pagan unos 230$. Para Venezuela con todo y sus grandes reservas de petróleo, gas, oro y coltan la mitad del mínimo de los mínimos, es decir $115 mensuales, es algo que el gobierno puede pagar y que le permitiría ser más exigente con los funcionarios que están desviando los recursos que son destinados para resolver los problemas de servicios públicos esenciales como educación, salud y seguridad pública.
Rómulo Herrera
Nota: A la Central Socialista que está proponiendo un salario mínimo de Bs, 2.000 mensuales, equivalentes a 454.5 dólares, pídales que analicen, porque es tonto siquiera proponer pasar, de un viaje, a tener el salario mínimo más alto de América. Eso no es posible ni en sueños, por ahora.