Vargas Llosa: El comunismo fue una fantasía que desapareció porque no satisfizo las necesidades del pueblo
“El comunismo representado por países como la República Popular Democrática de Corea (así se hace llamar oficialmente); representado por Venezuela, Cuba o Nicaragua, ¿dónde está el comunismo que quisieran implantar en nuestras tierras para que haya más justicia, más libertad?, se preguntó Mario Vargas Llosa escritor peruano, premio Nobel de Literatura, en el acto en el cual se le impuso la Orden Nacional al Mérito en nivel de Gran Cruz la más alta condecoración que concede el gobierno ecuatoriano, de manos del presidente Guillermo Lasso.
“No existe, el comunismo desapareció, fue una fantasía que surgió allá en el fondo de la Europa, donde nacieron todas las instituciones que hoy día importan. Y desapareció por la incapacidad absoluta que tuvo para satisfacer las necesidades más básicas de los pueblos que creyeron en esa fantasía».
Se refería Vargas Llosa a que el comunismo llevó a una hambruna atroz, con millones de muertos en China, país que a la muerte de Mao Tse Tung, el 1976, se abrió a los mercados a través de las Zonas Económicas Especiales, libertades económicas generales y la promoción de la propiedad privada, con Deng Xiaoping. Luego se desintegró la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, reconociendo sus líderes que el sistema comunista había fracasado.
Eso se concretó el 9 de diciembre de 1991, luego de 74 años de revolución. Los objetivos no se lograron: Los pueblos de China y URSS había pasado demasiada hambre y esas eran las capitales del mundo del comunismo, a partir de ahí tocó abrirse al mundo liberal, exceptuando a Bielorrusia, Corea del Norte y Cuba.