Nuestros escudos son la mascarilla y el distanciamiento social. Úsalos y exige a los demás que los usen.
Nuestras armas son las vacunas que vienen en camino. Pero no desafíes al enemigo ahora. Espera. Vacúnate primero y luego enfrenta al Covid, seguro de no contagiarte.
Recuerda que seguiremos en riesgo hasta ser vacunados.