ONU condena deportación de niños venezolanos
“Estamos profundamente preocupados por la decisión de las autoridades de Trinidad y Tobago de deportar a estos niños venezolanos”, enfatizó la portavoz de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Liz Throssell, mediante un comunicado.
Los niños fueron deportados el domingo, horas antes de una audiencia judicial en la que se iba a solicitar su permanencia, según la abogada Nafeesa Mohammed, que intentó detener la expulsión.
Los menores, así como nueve adultos, “fueron instalados en dos barcos y escoltados por los guardacostas de Trinidad y Tobago fuera de las aguas territoriales del país, en dirección a las costas venezolanas”, recordó la portavoz.
La deportación también fue denunciada por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
“Los niños no deberían ser nunca deportados de forma forzosa en función de estatuto migratorio, o el de sus padres”, recordó Throssell.
“La condición previa a toda devolución de un niño es que haya una decisión independiente e imparcial (…) y que retorno sea una solución que garantice los derechos, la salud y los intereses de los niños”, añadió.
La organización ha instado así a los gobiernos a suspender «todas las deportaciones forzosas en plena pandemia de coronavirus para salvaguardar la salud de los migrantes y las comunidades y proporcionar vías seguras y legales para los migrantes».
Por su parte, Trinidad mantuvo firme su defensa a la deportación de migrantes ilegales. El primer ministro Keith Rowley señaló que su país, de 5.128 kilómetros cuadrados y 1,3 millones de habitantes “no puede ser un campo de refugiados” para el vecino de 916.445 kilómetros cuadrados y 28 millones de habitantes.