Cruz-Diez llega a la gran pantalla en Free Color
A sus 94 años, el maestro Carlos Cruz-Diez continuaba enfrentándose a su máximo reto creativo: liberar el color de la forma. Tras décadas de estudio y experimentación, el camino del venezolano para encontrarlo fue captado por las cámaras de Alberto Arvelo, quien dirigió el documental Free Color, que se exhibe fuera de la competencia en el Festival de Cine Venezolano, en la plataforma del Trasnocho Cultural.
El director siempre había querido realizar un documental sobre el maestro del color, pero fue su hijo Jorge Cruz, quien falleció durante el desarrollo del proyecto, y su nieto Gabriel, quien también funge como productor, quienes impulsaron el filme, que se estrenó en enero en el Festival Internacional de Cine de Palm Springs, en California.
Henríquez y Arvelo ya habían comenzado el proceso creativo cuando conocieron esa obra imposible, una obsesión de Cruz-Diez que data de la década de los años 70 y que no había podido llevar a cabo. Es el color en el espacio, sin forma, sin soporte, casi en estado gaseoso. “Es la culminación de mi discurso”, indica el maestro en el documental.
“Nosotros al escucharlo hablar supimos que habíamos encontrado lo que estábamos buscando”, le relató Arvelo desde Los Angeles a la periodista de El Nacional Crysly Egaña.
El rodaje se llevó a cabo desde octubre de 2016 hasta finales de 2018, con un equipo muy pequeño y limitado, entre París, donde estaba residenciado el artista, y en Articruz Panamá, el atelier del maestro en la capital panameña.
Entrevistas con sus familiares, hijos, nietos y trabajadores de su taller, se entremezclan con conversaciones de Cruz-Diez con el actor Edgar Ramírez y muchísimo material de archivo de la familia, preservados y organizados.
“El maestro siempre amó el cine, de modo que tanto él como sus hijos Jorge y Carlos registraron buena parte de su vida con una cámara Super 8 y una 16mm. La exploración del documental nos llevó a tesoros familiares que transformaron buena parte del documental”, explica el director.
Se muestra la obra del maestro, su forma de trabajar -siempre colaborativa y en familia- y, como a su edad, aún se reunía con científicos a distancia para intentar llevar su última gran obra a cabo. Nascuy Linares y Devendra Banhart son los responsables de la música, y Nella Rojas interpreta una pieza del director Gustavo Dudamel.