Denuncian que Facebook permitió manipulación política
Sophie Zhang, una ex empleada de Facebook dedicada al análisis de datos, publicó un informe que revela cómo la red social, pese a tener conocimiento de lo que está sucediendo, es indiferente cuando fuerzas políticas usan la plataforma con el fin de manipular las ideas de las personas e influir en las elecciones de distintos países.
Según explica la analista, perdió su empleo después de haber expresado su preocupación ante los altos mandos de Facebook. Los directivos le habrían recomendado ignorar los problemas encontrados, ya que superaban el alcance de su puesto.
Su responsabilidad era identificar comportamientos coordinados no auténticos, tales como las redes de bots que buscan influir en la ideología del usuario con la finalidad de lograr un determinado propósito político. Presuntamente le ofrecieron 64.000 dólares para no hacer públicos sus hallazgos.
«En los tres años que pasé en Facebook, encontré múltiples intentos flagrantes de gobiernos extranjeros de abusar a gran escala de nuestra plataforma para engañar a sus propios ciudadanos, y causaron noticias internacionales en varias ocasiones», mencionó Zhang.
La exempleada señala que Facebook suele enfocarse en situaciones de impacto mayor, ignorando o actuando lentamente contra campañas locales que pretenden influir en la opinión pública de algunos países.
Entre los territorios donde habrían ignorado el tema se encuentran India, Ucrania, España, Brasil, Bolivia, Ecuador y Honduras, entre otros. Zhang indica, sin embargo, que Facebook no actuó con malicia, sino con irresponsabilidad por no querer dedicar los recursos suficientes para atender la problemática.
En Honduras, por ejemplo, se tardaron nueve meses para detener una campaña coordinada que usó recursos falsos para impulsar la imagen de Juan Orlando Hernández, actual presidente del mencionado país. En India identificaron una red de cuentas que trabajaban de manera coordinara para influir en las elecciones. Aunque la eliminaron, nunca dieron a conocer su existencia. En Bolivia y Ecuador se detectaron redes de bots para defender a los gobiernos en el cargo, pero Zhang decidió no priorizarlas debido a la carga de trabajo. Necesitaba ayuda, pero nunca la recibió.