Liberan a involucrada en caso Martín Hidalgo
Familiares del comerciante Martín Rafael Hidalgo (54) quien fue asesinado y enterrado en una finca de su propiedad en Osma en noviembre de pasado año, denuncian que Migdali Vanessa Molander Pérez, involucrada en el cruel hecho, recibió una orden de libertad por el Juez 5to del Tribunal de Control del estado Vargas, Pedro Flores Riveras.
Sostuvieron que se están saltando todos los procedimientos legales de forma arbitraria sin notificar a la Fiscalía ni al demandante, demostrando así su desapego al ordenamiento jurídico. “Denunciamos públicamente dicha acción como víctimas de tan atroz caso. Esta homicida es un peligro para la sociedad”, manifestaron.
Detectives del Cicpc Caracas determinaron que Molander se encargaba de manipular el teléfono de Martín para mantener contacto con sus familiares. Al ser interrogada confesó el homicidio, para el que contó con la complicidad de su pareja, José Alberto Sánchez Batista y otras tres personas: José Abraham Araque (detenido), Freddy y Rubén estos dos últimos aún prófugos.
La ambición los llevó a cometer el crimen
Desde el 3 de noviembre, el empresario desapareció extrañamente. A los pocos días sus familiares recibieron un mensaje desde su celular, en el que indicaba que estaba en otro país recibiendo un tratamiento médico, cosa que les pareció rara porque gozaba de buena salud.
En diciembre recibieron instrucciones por la misma vía para que se trasladaran al Registro Público de La Guaira y firmaran los documentos de venta de tres de sus propiedades, ya que necesitaba más dinero para el tratamiento.
Su hermana sospechó que algo no cuadraba e interpuso la denuncia el 29 de enero ante el Cicpc. Los detectives descubrieron que el occiso tenía las cuentas en cero, por lo que todo apuntaba a que había sido víctima de una estafa.
Siguiendo los rastros de los mensajes, dieron con la ubicación de Migdali, quien manipulaba el teléfono. En el interrogatorio confesó que habían ahorcado a Hidalgo en noviembre, trasladaron el cadáver hasta una zona boscosa dentro de la finca, donde lo quemaron. Su cuerpo fue finalmente encontrado en marzo.
Por la venta de las tres propiedades, la pareja le pagó 30.000 dólares a sus tres cómplices. Con el resto del dinero compraron vehículos, un local comercial y diferentes bienes, según las investigaciones del cuerpo policial.
Por José Ángel Maicabares