Parejas deben programar actividades recreativas para evitar rupturas por problemas económicos
- Especialistas indican que cuando hay falta de dinero la relación se enfría si no hay una sólida comunicación e interacción personal
Doriana León.-En tiempos de tempestad, hasta los árboles más ancestrales pueden desplomarse de raíz. Esto aplica en las relaciones de pareja, noviazgos y matrimonios, que tienden a fracturarse cuando existen crisis económicas. Cada vez más son más frecuentes las rupturas ante las necesidades económicas y la falta de posibilidades para cubrirlas.
Sin embargo; a pesar de todos los contratiempos que surgen en períodos difíciles, terapeutas de pareja, sexólogos y psicólogos coinciden en que siempre hay alternativas para alcanzar el equilibrio y evitar que las carencias toquen al amor.
Graciela Da Costa, terapeuta de parejas, señala que cuando el hombre y la mujer tienen una relación estable, bien sea de noviazgo, concubinato o matrimonio, los problemas económicos se pueden afrontar sin tantos roces.
«En una estructura fuerte de amor, comprensión, buen sexo, planificación y sinceridad, la falta de dinero puede debilitar momentáneamente la relación, pero no hacer mella en ella. Contrario a ello, si la relación es débil, no hay intimidad ni comunicación, la relación tiende a resquebrajarse al punto de llegar al divorcio o la separación».
La especialista asegura que desde el 2014 han aumentado los casos de parejas que buscan su asesoría para evitar una ruptura. No hay duda de que la crisis económica que atraviesa Venezuela no solo golpea los bolsillos, sino que también afecta las relaciones interpersonales.
«En la mayoría de los casos vemos parejas con disminución de su apetito sexual, porque las peleas apagan la pasión. Generalmente son parejas de profesionales en las que ha mermado su calidad de vida, pues ya los ingresos no son los mismos”.
Indica que el estrés en la pareja propicia el deterioro y la inestabilidad de la relación. Las dificultades económicas afectan al bienestar personal y, por añadidura, al bienestar de las familias.
“Es un factor desestabilizante que perjudica el estado emocional y la calidad de las interacciones, que terminan siendo negativas la mayor parte del tiempo. Esta inestabilidad emocional conlleva a un aumento de los conflictos que se manifiestan en enfados, violencia, críticas y deterioro del apoyo mutuo».
Paciencia, tolerancia y serenidad ante la crisis
Los tres factores fundamentales para la buena relación de pareja son la paciencia, la tolerancia y la serenidad a la hora de enfrentar y resolver los inconvenientes.
“La paciencia es una virtud que puede ayudar a superar cualquier tipo de contratiempos, no solo los económicos. Demuestra madurez y entendimiento. Y debe ir acompañada de la tolerancia para digerir, sobrellevar y manejar la vida cotidiana, y la serenidad ayudará a evitar discusiones y ofensas”.
Da Costa asevera que para afrontar las preocupaciones económicas es preciso estar tranquilo con la mente fresca y debe existir receptividad entre ambos para buscar soluciones y tomar medidas. “Lo más importante es que en la pareja no se pierda el respeto. Que cuando se esté evaluando un asunto económico no existan insultos o agresiones verbales, mucho menos físicas”.
Amor por encima de las cuentas
Una de las cosas que más agota a una pareja es la constante discusión acerca del dinero. Pagos de luz, comida, ropa, gastos escolares, entre otras muchas necesidades, hacen que una familia pueda perder la calma básica para construir y fortalecer sus relaciones.
“Cuando llega ese momento, si queremos salvar la relación, es necesario establecer la relación sentimental como una prioridad. No hay que dejar que las preocupaciones económicas sean el centro de la relación. Además, es importante afrontar los problemas como un reto compartido y no como un obstáculo individual”.
En estos casos, una comunicación fluida y frecuente es la clave para evitar las discusiones, indican los expertos.
La llama de la pasión siempre viva
Los especialistas aseguran que para garantizar una relación estable, además de la buena comunicación y la confianza, debe existir complicidad y relaciones sexuales placenteras entre la pareja.
La sexóloga Diana Bianchi indica que los esposos deben planificar esquemas de trabajo para lograr ser exitosos y mantener viva la llama del amor. “Cuando hay convivencia, la cama de la pareja debe ser un templo sagrado en el que se deben dejar de lado todos los rencores y contratiempos. Los cónyuges deben mantener activa la comunicación para la resolución de sus conflictos fuera del momento de relajamiento y la unión de los dos al momento de acostarse”.
Recomienda romper la rutina preparando veladas especiales, que con pocos elementos posibilitan una gran satisfacción emocional. “En consulta les recomendamos a las parejas preparar cenas con velas y activar juegos eróticos que los hagan vivir a plenitud su sexualidad”./va