Tiziana Polesel, presidenta del Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio), señaló que el descenso de 40% en la actividad comercial es producto de la voracidad fiscal y el contrabando de productos.
Según un reciente estudio de Consecomercio, “en promedio han cerrado en los últimos dos años 40% de los comercios en el país, es muy preocupante”.
Explicó que la contracción del consumo impide que se puedan trasladar los aumentos al precio del producto porque “si suben los precios vas a tener más dificultades para vender”.
Aseveró que el contrabando aniquila el comercio formal y muchos establecimientos se han visto forzados a irse hacia la informalidad “porque entre los impuestos y el contrabando está colocando al comerciante en el dilema de cerrar o pasar a la informalidad”.
Advirtió que esto también afecta a los emprendedores “quienes requieren pasar a la formalidad para registrar su marca, tener acceso a créditos y ser referencia comercial”.
Alertó que el comercio ha registrado un estancamiento e incluso una disminución de las ventas “después de ver un tímido crecimiento entre enero y marzo”.
Subrayó que la ausencia de crédito ha complicado el abastecimiento de los inventarios “y si no tienes inventarios no tienes ventas”.
Señaló que se ha formado una especie de burbuja en las principales ciudades del país. “La falta de servicios públicos propició que mucha gente prefiriera venir a vivir en Caracas, donde se genera un movimiento producto de esa migración”./jd