Nayerlis López Triviño y su pareja Ever Antonio Hernández Guerrero, torturaban con un arma de descarga eléctrica Taser a la hija de la mujer e hijastra del sujeto, en el sector Pueblo Viejo, Ezequiel Zamora, Barinas, por lo que
fueron capturados por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc).
Un vecino denunció estos actos porque siempre escuchaba los gritos de la pequeña de 8 años, por las torturas que sufría frecuentemente de sus progenitores.
La pareja le causó lesiones en diferentes partes del cuerpo a la niña y luego el padrastro, en el colmo de la maldad, la sumergía en un tobo con agua para aterrorizarla aún más.
El Cicpc informó que se incautó como evidencia una pistola Taser y un balde sintético de color blanco con capacidad para 20 litros.
Los Tasers son dispositivos de descargas eléctricas no letales, fabricados por la empresa Tasers International, cuyo objetivo es «ayudar a los oficiales de policía a doblegar a los sospechosos», porque incapacita a la persona mediante descargas eléctricas que imitan las señales nerviosas y confunde a los músculos los motores, principalmente brazos y piernas, inmovilizando al objetivo temporalmente.
El dispositivo TASER ha recibido fuertes críticas por parte de organizaciones de derechos humanos,1así como por el Comité contra la Tortura de la Organización de las Naciones Unidas, pues «provoca un dolor intenso, constituye una forma de tortura, y en algunos casos puede causar la muerte», se lee en Wikipedia.