Luisana Brito.- El crecimiento de la población y las conexiones de tomas ilegales al tanque principal fueron los detonantes para que el 80% de la población de Cerro Los Negro, en Anare, parroquia Naiguatá, se quedara sin servicio de agua potable, por que tienen que cargar directamente desde el río.
Williams Romero explicó que el tanque fue construido hace al menos unos 35 años atrás para abastecer a las comunidades de Casco Central, El Transformador, Los Blancos y Los Negros. Sin embargo, la arbitrariedad de unos pocos afectó a muchos, por lo que piden a Hidrocapital y Gobernación la reactivación del plan que quedó pendiente hace cinco años.
“Los habitantes de Los Blancos se encargaron de hacer tomas ilegales y por eso el agua llega a las primeras 10 casas, no tiene mucha fuerza. La gente llega cansada de su trabajo y se pone a cargar agua con tobos desde el río. Las parcelas cerca de la montaña también hicieron tomas ilegales”.
Destacó que entre la hidrológica, el estado y el consejo comunal habían acordado la construcción de un pozo para darle una respuesta a la problemática. “Necesitamos que construyan un tanque en lado de Los Negros. La mayoría de los vecinos somos de la tercera edad y discapacitados”, dijo./LB