Hasbely Bolívar
El 70% de las lavanderías y tintorerías se han visto obligadas a cerrar por la devastadora crisis económica y no piensan volver a abrir porque ha caído la demanda del servicio. La pandemia fue la estocada final para muchas.
En el caso de la lavandería Lo Mejor del Litoral, ubicada en La Páez, con más de 60 años de fundada y cuyo encargado es José Doval, se mantiene «guapeando» con mucha esperanza de que la situación no se alargue para no tener que cerrarla.
Doval contó que el personal se ha retirado por decisión propia. Ahora, de 11 le quedan 4, a quiénes trata de mantenerle el sueldo con la poca ganancia.
«A inicio de la pandemia la situación fue caótica. La gente no salía de sus casas y por ende la demanda cayó 70%. Abrimos en agosto del año pasado y fue prácticamente nulo. En enero de este año es que hemos tenido un poco de movimiento», explicó.
Señaló que la distribución del agua en la zona es el mayor de los problemas, puesto que llega cada 15 días y dura solo cuatro horas. Por eso, se vieron en la necesidad de pagar camiones para poder lavar y eso equivale a otro gasto más.
En la tintorería ecológica Quick-Press, ubicada en Playa Grande, subsisten con la limpieza de uniformes y trajes de trabajadores de algunas empresas que no han cerrado de momento.
El horario de atención es durante la semana flexible de 8:00 a.m. a 4:00 p.m. y los sábados hasta las 2:00 de la tarde./jd