En la cadena de nacionalización se presentan conceptos dudosos a la hora de facturar, es lo que señala el aduanero Freddy Rivas quien explica que los costos son exorbitantes y no tienen ningún tipo de respaldo.
Señala que, por ejemplo, los gastos de operación prácticamente los cobran dobles. “Facturan gastos de operación y servicios de desconsolidación de manera separada, cuando en realidad es lo mismo; cobro de limpieza de contenedor así esté limpio y en buen estado”.
Respecto a esto último manifestó que han sugerido que estos cobros deberían aplicarse exclusivamente a los importadores que hacen transacciones con mercancía que generalmente pudiese ensuciar los contenedores. “Los que traen químicos, motores engrasados y demás. Es un poco ilógico que cobren hasta tres mil bolívares por contenedor cuando lo que traen es zapatos en cajas, por ejemplo”.
Por otro lado, asegura que el depósito de garantía del contenedor es devuelto a su beneficiario meses más tarde y no al momento de la entrega del vacío, como debe ser, y además incompleto.
“Se hace el recorte por supuestos daños que tienen los contenedores después de cuatro a cinco meses de haber sido devuelto vacío a los patios receptores, cuando existe un documento que dice lo contrario que es el EIR (Equipment Interchange Receipt). Quieren cobrarnos hasta gastos administrativos, o sea que uno hasta les paga las nóminas por lo que parece. Eso es un delito, es estafa agravada”, dijo Rivas, quien resaltó que todos estos gastos solo incrementan los precios que terminan afectando al consumidor final.MEM/jd