María E. Moreno- Solo la mitad del parque automotor pesado del estado está operativo, pues la escasez de repuestos ha causado la paralización de decenas de unidades. Emigdio Palumbo, presidente de la Cámara de Transporte Pesado de Vargas, asegura que la baja de importaciones y unidades pone al sector en un estado caótico.
“Faltan desde cauchos hasta baterías. Muchas de las gandolas tienen fallas con el motor y los repuestos no aparecen. Mejoró últimamente la distribución de lubricante porque se hizo un enlace con Pdvsa, de resto estamos críticos”.
La escasez de repuestos parece agravarse con el transcurrir de los meses. El sector privado no tiene divisas para la importación de estos artículos, que necesita de una planificación de varios meses.
“Hay repuestos que son mandados a hacer, aunque hagan ya una subasta no llegarán para este año. Una vez que dan las divisas, deben esperar a liquidarlas, se hace el enlace con el proveedor para mandar a hacer el repuesto, estamos hablando de tiempo considerable. No es como comprar en una bodega. Latinoamérica es un mercado que varía, es un proceso que requiere tiempo. Lo poco que está llegando no cubre la alta demanda”, explicó Cipriana Ramos, presidenta de Fedecámaras Vargas. //MEM//a.r