50 busetas cincuentonas en total deterioro son una amenaza rodante
Juan Pérez, joven chofer de La Muralla Bolivariana, trabaja con una buseta que data del año 1972…¡50 años!
«Está muy deteriorada porque no hay cómo repararla. Es mentira que este oficio de chofer produce plata, porque a veces hasta nos quedamos endeudados con el diario del carro».
Afirmó que más de 50 unidades de la ruta Catia Mar-Caribe ruedan por la vía en alto riesgo, porque no hay posibilidades de repararlos.
“Tengo que pagar 70 dólares del diario del bus y en oportunidades tengo que pedirle al dueño para los pañales del niño, porque en mi jornada de 5:00 de la mañana a 7:00 de la noche, trabajando casi sin parar, 14 horas, a veces no me alcanza. Otros días tenemos que recogernos temprano porque pasamos horas rodando y no se consiguen pasajeros».
Uno de los problemas que han agravado la escasez de ingresos de los buseseros, es que muchos trabajadores prefieren quedarse en su casa o vender cualquier cosa en las esquinas, porque el salario mínimo se diluye entre el pasaje y el café con pan en la panadería.
“Son muchos carros en la vía, compitiendo por menos pasajeros, y con los rojitos tenemos la dificultad de que cobran el pasaje más barato y a veces nos trancan en las paradas.
«Es una competencia ruda por los pasajeros, todo el tiempo, pero compites o no llevas nada a casa».LL