Al menos 372 adultos mayores perdieron la vida de forma violenta, según el Informe de Victimización: Vejez en riesgo, de la Asociación Civil Convite.
Según el texto, 178 fueron por delincuencia; 69 por descuido, negligencia o impericia (violencia agravada, arrollamientos o accidentes provocados); 46 con responsabilidad del Estado (inanición, tortura o tratos crueles, falta de atención); y 79 muertes violentas de otro tipo (suicidios o accidentes)”.
Señalan que estos decesos violentos “están vinculados a la responsabilidad del Estado porque su obligación, establecida en los diferentes acuerdos y convenciones internacionales, es proteger, cuidar y mantener las condiciones materiales de vida que eviten la exposición anticipada al riesgo de morir de las personas mayores. Sus responsabilidades van desde la garantía del derecho a la vida y a la integridad hasta el ejercicio pleno de todos los demás derechos humanos”.
La mayoría de los adultos mayores que perdieron la vida en estas circunstancias tenían entre 60 y 80 años, 275 eran hombres y 97 mujeres. Las regiones del país con las cifras más altas son el Área Metropolitana de Caracas (36), Lara (35), Anzoátegui (33) y Zulia (30).
De acuerdo a lo señalado en el informe, estos fallecimientos podrían haberse prevenido y se evidenció la negligencia y el incumplimiento de las obligaciones por parte del Estado venezolano frente a amenazas procedentes de particulares y de entes público o privados.
Agregan que, en el segundo semestre de 2020, se registró un total de 539 decesos de personas de la tercera edad por covid o causas relacionadas al virus. De esta cifra 71 defunciones correspondieron a personal del sector salud.