El hombre de 75 años fue hallado culpable de cinco delitos
Pena máxima, es decir 30 años de prisión, fue la condena que recibió un anciano de 75 años de edad, luego de que el Tribunal Tercero de Juicio de Los Teques, lo encontrara culpable de los delitos de actos lascivos, actos lascivos violentos agravados en grado de continuidad, violencia psicológica, violación en grado de continuidad y amenaza.
En enero de 2018, al adulto mayor identificado como Pablo Antonio Martínez, fue denunciado por su propio hijo porque había abusado sexualmente de su niña de apenas cinco años en aquella época. El hecho ocurrió en una casa ubicada en el sector El Cumbito en San Pedro de los Altos, estado Miranda.
En esa oportunidad otra nieta del hombre, que para ese entonces tenía 18 años lo señaló de haberla atacado sexualmente cuando tenía cinco años. Situación que se prolongó por largo tiempo.
Durante la investigación que abrió el Ministerio Público surgió otra víctima. Se trata de una mujer de 27, sobrina política del aberrado, que le tocó sus partes intimas, la penetró cuando ella tenía cuatro años. Esto se repitió hasta que cumplió los siete años.
Todo se suscitó cuando las menores quedaban bajo su cuidado. En su momento ninguna habló porque las amenazaba de muerte.
Ante todas estas acusaciones el sujeto fue privado de libertad y luego de cinco años este martes 15 se realizó el juicio que concluyó con la citada sentencia.
Por este mismo caso imputaron también a Carmen Aurora Oropeza de Martínez, familiar del hoy condenado por el delito de actos lascivos agravados en comisión por omisión, pues presumían que esta ciudadana sabía todo lo que estaba pasando y nunca denunció.
Sin embargo, el tribunal decretó libertad plena a favor de la fémina porque no se pudo comprobar su responsabilidad penal en el hecho, reseñó el Diario Avance.