250 guaireños han sido mordidos por serpientes en lo que va de año, informaron Bomberos Marinos. Los ataques se incrementaron con las recientes lluvias. Advierten además que el suero antiofídico es escaso en los ambulatorios y hospitales del Litoral.
El fin de semana una niña de 10 años fue mordida por una víbora venenosa dentro de su casa en Chichiriviche, al extremo oeste de la entidad federal. Su madre la llevó hasta el ambulatorio de Catia la Mar, pero no tenían el suero antiofídico, por lo que tuvo que ser trasladada por paramédicos de Protección Civil hasta el Periférico de Pariata.
En Venezuela hay tres plantas para la producción del antiveneno: la Facultad de Medicina Tropical de la Universidad Central de Venezuela (UCV), la Universidad del Zulia (LUZ) y la Universidad de Los Andes (ULA).
“Uno no sabe qué estará pasando con el antiofídico en esas universidades. Las autoridades de salud deberían ocuparse más de este asunto. En La Guaira no hay mucho, pero en los Bomberos Marinos me dicen que todavía tienen para ayudar a quien lo necesite”, señaló Norberto López, sargento jubilado de la institución.
Expertos aconsejan a quien sufra un ataque de serpiente guardar la calma, colocar en alto la parte del cuerpo afectado, no realizar incisiones para extraer el veneno, no tomar medicamentos sin prescripción médica y aplicar el suero antiofídico, preferiblemente, en las primeras 6 horas desde la mordedura, reseñó Crónica Uno.