Luis López.- Desde hace cinco años, en el sector La Matica en la Jungla, parroquia Catia La Mar, 25 familias permanecen hacinadas en ranchos de tabla y zinc. En el lugar residen más de cincuenta niños. Cada pareja tiene un promedio de siete muchachos y no han sido beneficiados con la Misión Madres del Barrio, ni por ningún otro programa social.
“Nos tienen abandonados. Nosotros requerimos que nos ayuden con materiales, en vista de la falta de respuesta por la reubicación. El ingeniero Renzo quien fue el responsable de la construcción de las viviendas en el Canes, se llevó nuestros documentos y fotos. Es posible que los haya negociado dejándonos por fuera, porque nadie recibió beneficio de vivienda en este sector”, dijo Deysi Torres, afectada
Se conoció que en el lugar no hay red de agua servidas, ni potable. Los vecinos se ayudan con el apoyo de conexiones que hacen de un sector cercano. “El terreno es estable, pero sobrevivimos con lo poco que se ha hecho en el sector para que las aguas de lluvia no causen estragos en las casas”, comentó Torres./jd