* Las pocas unidades que hay están trabajando a media máquina
Lorena Correa – Los altos precios de los repuestos y la poca disponibilidad en los establecimientos, mantienen al sector transporte contra la pared, especialmente a los conductores de la ruta Catia la Mar-Caribe, registrando 200 vehículos accidentados por falta cauchos, baterías, tren delantero y transmisión.
Ramona Durantes, de la Asociación Muralla Bolivariana, explica que de las líneas José María Vargas, General Soublette, Unión de Choferes, Provolvar y la Muralla Bolivariana, menos de 800 están prestando servicio, redoblando sus funciones para cubrir la demanda.
“Los conductores son los principales perjudicados porque deben trabajar el doble, exponiendo las unidades a que en cualquier momento también se paralicen porque el trote está fuerte, muchos evitan laborar después de las seis de la tarde para no forzarlas tanto”.
Indica que un vehículo puede tardar hasta seis meses esperando por repuesto, ante los altos precios y la poca disponibilidad en el mercado. “Cuando logramos ahorrar el dinero ya no lo hay, o simplemente está al doble del precio inicial”.
“Estamos a punto del colapso, ya no encontramos cómo poder trasladar a tantos pasajeros. Los conductores están sufriendo, cada vez es más cuesta arriba conseguir los repuestos. Una buseta es el sustento de cinco familias, porque de ella se benefician dos conductores, dos colectores y el dueño; seguimos en la lucha por sobrevivir”. LC/ar