Todo comenzó este lunes 17 de julio cuando el chef Néstor Mauricio Vivas Pineda, de 33 años, y su amigo de infancia Juan Carlos Abril Contreras, de 37, estaban compartiendo sanamente en un centro de diversión… y fueron atraídos por 2 mujeres.
Ellas estaban a la caza de hombres que denotaran que tenían recursos económicos para robarlos.
Un método viejo, que ahora se está popularizando y los hombres siguen cayendo en tentación.
Los cuatro charlaron animadamente, y a ellos no les pareció raro que una de ellas propusiera que siguieran divirtiéndose en su casa, situada cerca del casco central de Guacara, sector La Coromoto, en el estado Carabobo. Nada de que sospechar, sobre todo cuando estás emocionado por “una conquista express”.
Para allá se fueron a continuar la fiesta, y cuando la adrenalina estaba en su apogeo, apareció un sujeto desconocido, amenazándolos con un arma para que entregaran todo lo que tenían encima.
¡Era una trampa!
¡Los ángeles que habían caído del cielo, solo eran un señuelo!
Frustrados, los amigos se resistieron al robo, porque, además, Néstor practicaba artes marciales mixtas, como relata su amiga Heberlizeth González. Estaba furioso y esa fue su perdición. Las artes marciales se estrellaron contra la dura realidad: Una pistola puede más que la fuerza física.
Heridos como estaban, los amarraron, para someterlos, pero algo más sucedió que agravó las cosas y los bandidos decidieron lo peor: Así maniatados estaban a su merced y los apuñalaron hasta la muerte.
Los 2 cadáveres fueron enterrados en el patio de la casa.