La noche del martes, durante enfrentamientos entre manifestantes y la fuerza pública murió un indígena, en la localidad amazónica del Puyo (sureste), informó La Alianza de Organizaciones por los Derechos Humanos. La policía indicó que “que la persona falleció a consecuencia de la manipulación de un artefacto explosivo”. De esta manera aumentan a dos los fallecidos en nueve días de protestas en Ecuador contra el gobierno del Guillermo Lasso.
Con palos de madera, lanzas y protegidos con escudos artesanales, unos 10.000 indígenas, protestan en varios puntos de Quito reiterando su llamado a que se rebajen los precios de los combustibles. Los militares denuncian que las protestas representan un “serio riesgo” para la democracia.
En una carta difundida en Twitter, Lasso aceptó, “por el bien del país”, participar en “un proceso de diálogo franco y respetuoso” con la Conaie, la poderosa organización indígena que convocó las protestas, pero Leonidas Iza, líder de esta respondió condicionando el diálogo a la derogatoria del estado de excepción vigente en seis de las 24 provincias del país.
El ministro del interior, Patricio Carrillo en una rueda de prensa desde la Comandancia de la Policía Nacional adelantó este miércoles 22 de junio del 2022 que denunciará en la Fiscalía a los dirigentes nacionales del movimiento indígena y a Marlon Vargas, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía Ecuatoriana (Confeniae). El Ministro les responsabiliza por las víctimas del enfrentamiento del 21 de junio en Puyo, capital de Pastaza.
Además informó que la violencia en esa ciudad amazónica deja un fallecido, seis policías heridos por traumas de perdigones, tres policías retenidos en comunidades, 18 policías desaparecidos. Respecto a infraestructura: 18 vehículos de la Policía incendiados, una Unidad de Policía Comunitaria (UPC) incendiada. Hasta las 8:00 ciudadanos de comunidades Shuar y Quichuas tienen sitiada a la ciudad de Puyo.
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