* Complica la situación que no cuenten con nefrólogos
Bárbara Rondón
Desde enero y hasta lo que va de mes se han contabilizado 17 pacientes fallecidos en el Hospital José María Vargas de La Guaira por falta de insumos, especialistas y medicamentos como el antibiótico, que se necesitan para las infecciones.
Elsa de Sousa, familiar de un paciente renal, denunció que debido a los cortes de luz abruptos no han podido trabajar en el hospital, pues han pasado más de un día y medio sin recibir las diálisis y los pacientes quedan a la deriva porque la planta del Seguro Social no tiene la suficiente fuerza para mantener activas las máquinas. En el centro se encuentran aproximadamente 8 máquinas dañadas por falta de repuestos.
“Aquí los pacientes traen sus alimentos y sus medicinas”. Reiteró que los altos precios y escases de medicamentos, antibióticos e insumos genera a los pacientes un descontrol en el cuidado que deben llevar. Además, la falta de reactivos también los pone en riesgo porque no pueden realizarse los exámenes de control de la hemoglobina.
Recordó que no hay una enfermedad propia del riñón que lleve a los pacientes a realizarse la diálisis, sino que surge como consecuencia de diferentes enfermedades como la diabetes, la hipertensión, la obesidad, el tabaquismo, además del colesterol y triglicéridos altos. Estas son enfermedades silentes, que dan síntomas después de cinco a siete años cuando ya el daño celular es delicado.
Los riñones filtran todos los días aproximadamente 180 litros de sangre y eliminan del cuerpo alrededor de dos litros de desecho y agua en exceso a través de la orina. Estos son los encargados de controlar la presión arterial, estimular la medula ósea para producir los glóbulos rojos y mantener el equilibrio de todas las funciones corporales./jd