112 es la nueva cifra de fallecidos por incendios en Chile
La cifra de muertos por los incendios en la región chilena de Valparaíso, en el centro del país, subió a 112, informó este domingo, 4 de febrero, el subsecretario del Interior chileno, Manuel Monsalve.
El presidente chileno, Gabriel Boric, ya había señalado este domingo, desde una de las zonas más afectadas, que la cifra de fallecidos iba “a crecer significativamente”.
“Es la tragedia más grande que hemos vivido como país desde el terremoto del 27 de febrero de 2010“, dijo el mandatario Gabriel Boric, desde Quilpué, ubicada en Valparaíso y una de las zonas más afectadas por los incendios.
Tras una reunión del Comité de Gestión del Riesgo de Desastres (Cogrid), con base en los últimos datos recogidos por el Servicio Médico Legal (SML), el subsecretario de Interior chileno, Manuel Monsalve. detalló la noche del domingo que, además de 112 muertos, hay casi 40.000 personas afectadas por la destrucción de viviendas –sea por completo o parcialmente-.
Boric, quien decretó duelo nacional durante dos días a partir del lunes, dijo que “una de las urgencias más acuciantes es recuperar los cuerpos de las personas que han fallecido”.
A estos incendios se suman la alta temperatura registrada, que en Santiago llegó a 37,3 grados Celsius, la tercera más alta en la historia de la capital, según la Dirección Meteorológica de Chile.
De otra parte, en respuesta a la emergencia, el presidente chileno, decretó “el estado de excepción por catástrofe para disponer de todos los recursos necesarios” para combatir los fuegos. Asimismo, un toque de queda este sábado en la noche (hora local) para agilizar la llegada de servicios de emergencia.
La alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti, precisó:
“Estamos frente a una catástrofe sin precedentes, una situación de esta envergadura no había sucedido en la región de Valparaíso“
Previamente, desde el palacio de La Moneda, en Santiago, el presidente Boric advirtió que el número de víctimas irá “en aumento” dada la “dimensión” que está tomando “la tragedia”, que deja además 43.000 hectáreas quemada