El Programa Mundial de Alimentos (PMA), reveló en su más reciente informe que un 11% de la población venezolana que vive en Ecuador reside en hogares que están por debajo de la línea de la indigencia alimentaria. Al organismo internacional le preocupa que un quinto de los migrantes que llegaron a ese país huyendo de la crisis económica, social y política, no se esté alimentando de forma correcta, lo que les genera problemas nutricionales y de salud.
Según los datos, otro 36% no se encuentra en situación de indigencia, pero sus ingresos estarían por debajo de la línea de pobreza. Hasta mediados de agosto, algo más de 165 mil venezolanos cumplieron con el registro biométrico y de estos 128 mil estaban habilitados para solicitar la Visa Humanitaria.
Ese fue uno de los temas que se trató el sábado en la Mesa de Movilidad Humana organizada por la Cancillería ecuatoriana y en la que participaron entidades de la sociedad civil, embajadas y organismos internacionales.
Para intentar paliar esa situación, el Programa Mundial de Alimentos ha entregado asistencia humanitaria a familias vulnerables a través de comedores, albergues, casas de acogida y otros mecanismos, explicó el representante del Programa en Ecuador, Mario Touchette.
Por su parte, el viceministro de Movilidad Humana Carlos Alberto Velastegui informó que mantienen diálogos permanentes con representantes de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y Acnur con el objetivo de lograr la cooperación que permita continuar atendiendo las olas migratorias. En ese sentido, el Mecanismo Global de Financiamiento estaría por otorgar 14 millones de dólares como un reconocimiento a los esfuerzos que realiza el Estado ecuatoriano frente a la migración de connacionales.
